El relleno negro es un platillo típico del estado de Yucatán, se prepara con varias especias que hacen que la carne quede negra, lleva huevos cocidos y el sabor es delicioso. Hoy mi corazón tiene un color parecido a esa comida, tal vez es porque ayer festejamos de manera casual el cumpleaños de Carlos y uno de los platos a ofrecer era ése, además el postre fue pastel de chocolate, todo negro, je je. Algunas veces parece que las situaciones de mi vida son lo suficientemente astutas e irónicas para hacerme sentir fuera del planeta. Hoy por ejemplo mi amiga vomitó y yo también, ella por la hamburguesa yo por el relleno negro de mi alma. Hablaremos, mi cabeza está a punto de explotar. Carlos se va en una semana, me deja, A dónde irá? no sé, pero estoy tranquila porque sé que por lo menos una parte de mí intenta y cultiva su felicidad a base de paciencia, colores y poesía -Había una luna inmensa en el cielo del mundo, se me perdían los ojos mirándote- pero hoy no hay luna y mis ojos se pierden buscándote.
De manhã café
para o almoço mais café
para jantar... paciência... paciência.
E na fria madrugada abrir a janela e procurar uma estrela cadente para namorar.
De manhã café
para o almoço mais café
para jantar... paciência... paciência.
E na fria madrugada abrir a janela e procurar uma estrela cadente para namorar.
Es difícil ser ansioso y no tener un ansiolítico a la mano, es triste ser depresivo y no poder comprar antidepresivos sin receta. Es horroroso no poder pagar una terapia, cuando la mejor terapia son sus labios y sus manos en tu cuerpo. Y Pessoa me dice a cada instante -prepárate para lo peor y espera lo mejor-
Estaremos bien, yo, mi alma y el pájaro que hoy abrió los cajones equivocados... sé que cada cosa tiene un lugar, un espacio y un momento, hoy me repito insistentemente que llegará, tarde o más tarde llegará.
Buenas noches!
Um comentário:
Se cuida, minha amiga, se cuida. Abraço, grande.
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